Leí hace unos meses en la prensa que nuestra fiel amiga Nancy había cumplido 40 castañas y no me lo podía creer porque, claro, los años pasan para todas, así que si ella cumple 40, las demás cumplimos... no quiero ni pensarlo!!.
La Nancy "clásica" (véase imagen adjunta) era un tesorito. En casa había 2: la de mi hermana (rubia y nuevecita, con ese olorcillo a plástico-goma de recién estrenada) y la mía (pelirroja ó caoba, un poquito sobada y, desde luego de segunda mano... jajajajaja).
Mi hermana y yo jugamos en cientos de ocasiones con las Nancys: que si se iban de fiesta, que si se cambiaban de ropa para ir a cancarrear, que si se peinaban de esta o aquella manera... pasamos miles de minutos irrepetibles e inolvidables jugando con nuestras Nancys.
Teníamos bastantes trajecitos (todos muy sesenteros, hay que confesarlo): jardinera, pintora, enfermera (este por duplicado porque los Reyes Magos debían tener alzeimer y se les iba un poco la pelota), esquiadora, etc.
Tiempo después se sumaron Lesly (hermana de Nancy) y Lucas ("su pibito") pero, entre que mi hermana ya era mayorcita, y que su imagen nunca estuvo a la altura de Nancy, ya nunca fue lo mismo.
Con nuestros añitos ya cumplidos, una noche vivimos un "dejaveu" o un "revival" (según se mire) y nos tiramos horas y horas jugando como aquellas niñas que fuimos, con vestiditos, zapatitos, accesorios y de "tó".
Ahora, Nancy tiene nuevo look. Se ha sometido a varias operaciones de estética: rinoplastia, liposucción, inyecciones de botox por aquí y por allí... y, en mi opinión y como suele suceder a las que quieren recuperar la "eterna juventud", ha perdido bastante.Ya no queda nada de aquella muñeca de mofletillos inflados, muslos rollizos, rodillas marcadas y culete rechoncho.
Ahora, tiene los ojos grandes, las pestañas largísimas, los labios "regordetes" y... viene con pendientes de serie!! (recuerdas chacha cuando las clavábamos bonis en las orejas??).
En fin, sea como fuere, aquí va mi recuerdo a una muñeca con la que jugamos en nuestra niñez y que tantos buenos momentos nos hizo pasar... (junto con la Señora Javiera, claro está pero... esa es otra historia :-).
Besos para todos,
Chinche
En fin, sea como fuere, aquí va mi recuerdo a una muñeca con la que jugamos en nuestra niñez y que tantos buenos momentos nos hizo pasar... (junto con la Señora Javiera, claro está pero... esa es otra historia :-).
Besos para todos,
Chinche
3 comentarios:
Jajajajajajaja, no sabes la falta que me hacía reirme a carcajadas.
Imposible olvidar aquella Nancy..., está bien lo confieso, la rubia era tuya, sí TUYA y yo te dí el cambiazo, vamos que te comí el coco dicendo cosas tales como: la pelirroja (la mía) es mucho más mona, vamos donde va a parar...la rubia es horrible; hasta que finalmente aceptaste de buen grado cambiarme la TUYA nueva por la vieja, jajajajajja. Tu perdón ha tranquilizado mi conciencia que llevaba años dándome la brasa.
En cuanto a la nueva imagen tengo que decir que estoy totalmente de acuerdo contigo, además como decía Adolfo Domínguez: "la arruga es bella".
No hay más que vernos a nosotras, que jugábamos con la Nancy y seguimos siendo un par de "pibones" (y sin arrugas), ya quisieran muchas...
Pues por todos aquellos momentos que nos hicieron tan felices, y porque seguimos estando tan unidas como antes, incluso jugando ya con otras muñecas y aunque seamos infieles a Lucas.
Te quiero mucho Chinche
Como es lógico,... un caballero que se precie de tal, no juega con tales objetos jamás,... pero,... si que tiene una hermana que ha jugado con estas muñecas, y seguro que le gustará este texto,... (en confianza,... no se lo digáis a nadie,... a mi también).
Expresiones "de famosa" varias.
Entonces, de jugar a papás y a mamás ni hablamos ¿no?.
Uno beso Capi
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